José Bueno - Córdoba - España 

Carné de Escuela Radio Maymó año 1964 

Mi interés por la radio viene desde que tenía 15 años, ya mi padre, pensando que sería mi futuro, me apuntó a un curso por correspondencia sobre radio, (aún tengo el carné) la academia se llamaba “Escuela Radio Maymó” (por cierto, que aún existe e imparte el mismo curso y tiene el mismo logotipo: http://www.escuelaradiomaymo.com/).

Con un auricular viejo de teléfono y el material que me enviaron conseguí montar un receptor de galena. Todo fue muy rápido, yo solo quería escuchar por el auricular algo que se pareciese a una transmisión de radio. Quedé perplejo al comprobar que sin necesidad de conectarlo a la electricidad podía escuchar una emisora, era EAJ24 Radio Córdoba. Qué alegría me dio, y sobre todo que el receptor lo había fabricado yo.

Recuerdo que mi padre tenía un receptor “Iberia”, con una antena de hilo largo podía escuchar las emisoras antifranquistas que emitían desde fuera de España. Como esto estaba prohibido y había que pagar una tasa por tener radio, solo los vecinos más cercanos lo sabían.

En aquellas fechas comenzaban a aparecer los primeros radio transistores a pilas (batería), tan solo se escuchaba la onda media. Recuerdo que, aparte de Radio Córdoba, comencé a escuchar una emisora lejana, se llamaba Radio Atalaya de Cabra, era de una población a unos 90 kilómetros de Córdoba, me ilusionaba escribirles a su programa mañanero en el que el locutor leía los chistes (historietas breves) que les enviaban los oyentes, era maravilloso escuchar mi nombre en la radio.

Después escuchaba a Radio Popular de Montilla, actual Cope Córdoba y luego ya vino la FM, eso era otra cosa, con tan buena calidad  de sonido me tiraba las noches enteras grabando canciones de entonces. Por la noche no emitían anuncios y las canciones se grababan sin anuncios. El receptor se llamaba “Tarantela”

Sobre el año 1986, pertenecía a la APA del colegio de mis hijos, les instalé una rudimentaria emisora de FM, con alcance aproximado de un par de kilómetros, nos servía para informar a los padres de alumnos y para hacer algún que otro concurso radiofónico con los niños. Ahí fue donde comenzó el verdadero gusanillo por la radio. Un antiguo colega radioescucha, Guillermo Gómez, me envió un informe de recepción de esta pequeña emisora, yo no sabía para qué servía aquello, ya me explicó que tenía que confirmarle la escucha y me convenció para hacerme socio del GECE, ahora AER. Estuve desde el año 1987 hasta el 1995. Después lo retomé en el 2001 y hasta hoy.

 

José Bueno

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